Mi novia de universidad.

Quería compartir un relato

Todo empieza en mi universidad yo tenía una novia que entrenaba artes marciales todos los viernes, el entreno era en la noche a las 8 en el último piso de uno de los bloques más nuevo, yo siempre la acompañaba y a veces entraba a observar el entrenamiento y otras veces me quedaba en uno de los salones del piso de abajo mirando cosas en mi celular o terminando tareas de el día. En el mismo piso del salón en el que me quedaba estaban los baños y era donde los que tomaban la clase iban a ponerse su vestimenta de entreno. Después de acompañarla algunas veces me fijé en una de sus compañeras una chica de media-alta estatura (1,70+-)  de piel morena, una cara agradable, unas tetas comunes más bien pequeñas pero un culo delicioso redondo, bien ejercitado y que con cada movimiento se agitaba como gelatina, veía cada movimiento que hacía cuando corrían en su sitio para calentar y cuando hacían estiramientos mi mirada solo podía fijarse en ese culo. De un momento a otro me di cuenta que nuestras miradas se cruzaron y ella no paraba de mirarme simplemente hizo una pequeña sonrisa y retiro su vista, así pasó durante unas tres clases hasta que un día estaba en el salón esperando con la puerta cerrada (puerta de madera con una pequeña ventana a un lado espero la identifiquen) la cuál oportunamente daba hacia los baños y entonces fue cuando los planetas se alinearon y justo ahí estaba ella cambiándose, ya solo le faltaba la parte de abajo pero no pude evitar mirarla me empecé a poner duro y solo veía como subía su pantalón y sus nalgas se apretaban hasta entrar. Luego ella subió y yo quede súper caliente entonces le timbre a mi novia y le dije que bajará un momento ella bajo y sin pensarlo la metí al salón y puse seguro a la puerta apague la luz para que no pensaran que había alguien dentro y empecé a besarla, al principio no quería por qué tenía miedo de que nos descubrieran ahí dentro pero mi calentura la contagio y fue cuando se puso de espaldas a mi y empezó a rozarme el pene con sus nalgas y yo simplemente pensaba en las de esa otra chica, mientras lo hacía yo le besaba el cuello y deslice mis manos por debajo de su blusa y empecé a jugar con sus pezones, ella rozaba cada vez más fuerte su culo otra mi verga hasta que se dio vuelta y abrió mis pantalones y me saco el pene, yo pensando aún en la otra chica le dije que se lo quería meter pero me dijo que no debíamos hacer ruido y que eso sería lo máximo que haría entonces me conforme, ella comenzó a hacerme la paja mientras yo seguía jugando con sus tetas, siguió así por un rato hasta que se dio cuenta que me iba a venir entonces lo hizo más rápido y con su otra mano empezó a tocar sus tetas, no aguante más y me vine, llene toda su ropa de entreno y ella estaba muy feliz, luego de eso fue a cambiarse y nos fuimos a nuestras casas, eso lo hicimos unas dos veces más, veces en las que yo me había acercado a la otra chica, ya sabía su nombre, su carrera y teníamos una buena conexión, ya había pasado un semestre completo y un poco más desde la vez que la Vi cambiarse y había aprovechado cada momento en el que la encontraba sola para acercarme hasta que un día paso algo que no olvidó y que me encantaría que otra persona viviera por qué es la mejor sensación del mundo...lo logré...me la folle y justo en el mismo salón en el que mi novia hacia su trabajo...

Era un viernes normal y como siempre acompañe a mi novia a su entreno ella entro y bendita sea mi decisión le dije que me quedaría abajo en el salón y debido a que no vi a nadie del personal de limpieza deje la puerta abierta, todo estaba normal estaba viendo mi celular y unos 20 minutos después vi que por las escaleras llegaba ella entro directamente al baño y en un momento ya tenía su ropa de entreno puesta salió y antes de tomar las escaleras hacia el lugar donde entrenaban me miró entonces vino a saludarme, le respondí el saludo y además le hice un cumplido ella me miró de una manera pícara y dio vuelta para irse entonces pensé que sería mi mejor oportunidad, entonces la agarre del brazo y le dije te

enojas si hago esto y me lance a darle un beso ella por reflejo se inclino hacia atrás pero ya nada me podía parar la bese y cuando me estaba separando para saber su respuesta ella me beso de vuelta, sabía que no me podía demorar mucho por qué mi novia tal vez podría bajar pero en vez de ser un motivo para dejar de hacer lo que estaba haciendo eso me calentaba más, use la misma técnica que con ella cerré la puerta con seguro y apague la luz, cuando lo hice por un momento ella quiso parar pero empecé a besar su cuello y sus ganas crecieron, comenzamos a besarnos yo recorría su cuello con mi lengua y sentía como su respiración se aceleraba, entonces llegó el momento que tanto esperaba recorrí su pierna desde la parte de atrás de la rodilla con mi mano y empecé a subir hasta llegar a su culo lo empecé a apretar y a darle nalgadas y con mi otra mano toca una de sus tetas mientras ella hacia pequeños gemidos con cada palmada. Todas las ideas de que podrían encontrarnos o mi novia podía verme se habían borrado de mi cabeza, entonces agarré su mano y la puse sobre mi pene ella empezó a masajearlo entonces levanté su blusa y su top para ver sus tetas, no resistí y empecé a lamerlas, ella abrió mi pantalón y saco mi pene empezó a hacerme la paja y yo tocaba uno de sus pezones mientras que la otra mano la deslice por su espalda y la metí por debajo de su licra y agarré una de sus nalgas ella seguía con mi pene en su mano y me dijo quiero que me la metas, sin pensarlo dos veces y dándome cuenta que no le importaba nada de lo que podría pasar le di media vuelta e hice que se apoyará con sus codos en un escritorio y le baje la licra, ahora podía ver ese gran culo frente a mi todo para que yo lo disfrutará, jugué un poco con mi dedo para preparar la zona y acerque mi pene, lo moví un poco de arriba a abajo en sus labios y la metí poco a poco, ella agarró con fuerza mi mano con la que sostenía su cadera, y empecé a meterlo y sacarlo, como ella no quería hacer ruido solo se escucha como hacía suspiros fuertes con cada metida, y desde atrás la vista era perfecta cuando lo metía sus nalgas se movían hacia adelante y hacia atrás y solo me daban ganas de nalguearla, así estuvimos por un rato hasta que le dije que me iba a venir, ella si hizo a mi lado y empezó a hacerme la paja para que terminara, lo hice y cayó todo a un lado del escritorio en el que lo hicimos, quince seguir jugando con ella para complacerla pero me dijo que ya había pasado mucho tiempo y que debía ir a cambiarse antes de que salieran del entreno, entonces se fue desde ese día ya no volvimos a hablar como hasta ese momento y simplemente nos saludábamos como unos extraños conocidos, con mi novia terminamos como unos 4 meses después de eso y creo que nunca se enteró de lo que pasó. Pudo ser una historia perfecta y haber repetido cada viernes pero no sin embargo esa sola vez valió totalmente la pena y es una anécdota que siempre me gusta recordad.